Por: Paola UgazLima, Perú
05 de octubre de 2007
"Para mí es extraño que me vean los más pensantes de este país, la elite, la gente con la economía más saludable; no es políticamente correcto decir 'yo veo a Magaly', pero a la hora de decidir están ahí. Son unos hipócritas totales, porque luego critican el programa". Magaly Medina, la periodista y conductora del programa de espectáculos Magaly TV, el mas exitoso de la televisión peruana y el que factura mas publicidad al año, se ha convertido en una de las mujeres mas poderosas del país, de acuerdo a la "encuesta del poder" que realiza la empresa nacional Apoyo, Opinión y Mercado.
Medina Vela, tal el verdadero nombre de Magaly, tiene 44 años y se apoda así misma "la Urraca", un ave que representa bien su espíritu parlanchín; su ocupación principal son los chismes e intimidades sobre los personajes que forman parte de lo que ella ha titulado "el Chollywood peruano", el universo farandulesco de su país, formado por actores, cantantes, vedettes y futbolistas, al que describe usualmente con sarcasmo.
Nadie en Perú es indiferente a la periodista de pelo teñido a fuego vivo: es tan odiada por los que sufrieron la revelación de sus romances secretos, aventurillas, noches de bohemia o arranques de furia como venerada por sus seguidores, que son miles de acuerdo a los sondeos de rating. Buena parte de esos fans son personas de sectores de buena posición económica en la sociedad peruana.
La lengua de "la Urraca", filosa y acompañada de una estentórea carcajada, es el instrumento perfecto para los destapes exclusivos de su programa, lo que le ha valido varios juicios por difamación que sin embargo no la han intimidado: cada noche, desde hace ya 10 años, Magaly aparece con su incontrolable impulso chismográfico.
La lengua de "la Urraca", filosa y acompañada de una estentórea carcajada, es el instrumento perfecto para los destapes exclusivos de su programa, lo que le ha valido varios juicios por difamación que sin embargo no la han intimidado: cada noche, desde hace ya 10 años, Magaly aparece con su incontrolable impulso chismográfico.
El polémico fenómeno es estudiado por científicos sociales en las universidades locales como un hecho que muestra el influjo del espectáculo y el gusto por el chisme y el morbo en la sociedad peruana. Es común que se hable en textos académicos y medios de comunicación de "la magalización" de la política o del fútbol, por ejemplo.
En una entrevista exclusiva con Terra Magazine, Medina opinó que como su programa es tan exitoso, "muchos entienden que no es políticamente correcto decir que lo ven". Hay quienes temen a ser señalados como cómplices pasivos de "la Urraca" y de su gusto por airear los trapitos ajenos. De eso y de unos cuantos otros temas habló en esta charla con la periodista Paola Ugaz.
(Continúa )
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